Desde siempre la idea del adivino ha estado relacionada con un sistema, con un medio para indagar el futuro. Existe una moderna tendencia, anunciada como vidente natural que afirma que no es necesario utilizar ningún tipo de mancia para esto. Que esa persona ha nacido con el superpoder de ver las cosas ocultas como el que ve la televisión.
De entrada esto se aleja mucho de lo tradicional, y aunque pueda parecer tremendamente excitante creer que alguien tiene esa capacidad la historia del oficio nos muestra que el adivino siempre necesita un medio que es el que realmente establece la posibilidad de penetrar en lo oculto.